El Ministerio de Trabajo está preparando una orden ministerial para crear unos programas dedicados a formar inmigrantes en sus países de origen "con compromiso de contratación" en España, para sectores en los que falta mano de obra. Entre estas actividades están la atención a la dependencia, la construcción y distribución.
El problema, en la mayoría de las ocasiones, no es que no haya personas dispuestas a trabajar, sino que no tienen la formación especializada que requieren las empresas.
Estas quejas han llegado al Ministerio de Trabajo, que se ha puesto a diseñar junto con empresarios y sindicatos varios programas para impartir formación a trabajadores inmigrantes en sus países de origen, "con el compromiso de contratarles en España".
De hecho, el Ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ya avanzó ayer, durante su intervención en unas jornadas de Edad y Vida, que estos programas serán necesarios con toda seguridad, para formar y contratar en origen a muchos de los cerca de medio millón de trabajadores que serán necesarios los próximos años para atender a ciudadanos dependientes, que no pueden valerse por sí mismos.
En concreto, Caldera precisó que la puesta en marcha de la ley de Dependencia -que el Senado aprobará esta semana y el Congreso, definitivamente, en quince días- requerirá la creación de unos 300.000 empleos directos y otros 200.000 indirectos, en los próximos ocho años.
Este es uno de los sectores, que exigirá formar y contratar a inmigrantes en origen, pero hay otros como el de la construcción o de las grandes empresas de distribución, entre otros, que también lo han demandado según fuentes de Trabajo.
Según explicó Caldera, la orden ministerial sobre la que está trabajando con los agentes sociales, creará 'un nuevo modelo de agencia de contratación'. Si bien, fuentes del Ministerio precisaron que la fórmula legal que se escogerá para impartir esta formación y hacer las contrataciones aún no se ha cerrado del todo.
De esta forma, desde el Ministerio de Trabajo se sigue apostando por la contratación de inmigrantes para solventar las carencias del mercado laboral español.
El problema, en la mayoría de las ocasiones, no es que no haya personas dispuestas a trabajar, sino que no tienen la formación especializada que requieren las empresas.
Estas quejas han llegado al Ministerio de Trabajo, que se ha puesto a diseñar junto con empresarios y sindicatos varios programas para impartir formación a trabajadores inmigrantes en sus países de origen, "con el compromiso de contratarles en España".
De hecho, el Ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ya avanzó ayer, durante su intervención en unas jornadas de Edad y Vida, que estos programas serán necesarios con toda seguridad, para formar y contratar en origen a muchos de los cerca de medio millón de trabajadores que serán necesarios los próximos años para atender a ciudadanos dependientes, que no pueden valerse por sí mismos.
En concreto, Caldera precisó que la puesta en marcha de la ley de Dependencia -que el Senado aprobará esta semana y el Congreso, definitivamente, en quince días- requerirá la creación de unos 300.000 empleos directos y otros 200.000 indirectos, en los próximos ocho años.
Este es uno de los sectores, que exigirá formar y contratar a inmigrantes en origen, pero hay otros como el de la construcción o de las grandes empresas de distribución, entre otros, que también lo han demandado según fuentes de Trabajo.
Según explicó Caldera, la orden ministerial sobre la que está trabajando con los agentes sociales, creará 'un nuevo modelo de agencia de contratación'. Si bien, fuentes del Ministerio precisaron que la fórmula legal que se escogerá para impartir esta formación y hacer las contrataciones aún no se ha cerrado del todo.
De esta forma, desde el Ministerio de Trabajo se sigue apostando por la contratación de inmigrantes para solventar las carencias del mercado laboral español.